La multitudinaria reacción de la mayoría social vasca contra las detenciones ordenadas hace unos días por Garzón invitan a la esperanza. Parece que el pueblo despierta de su letargo inducido a través de unos medios de comunicación que le proporcionan promesas de bienestar material y de reconocimiento puramente formal de su identidad cultural. Ha sido preciso, sin embargo, que el poder ejecutivo-judicial español descienda un peldaño en este abismo totalitario pàra que incluso el partido que representa los intereses de la oligarquía vasca empiece a sentir miedo. El mismo miedo que debieron sentir los conservadores alemanes ante el monstruo que habían dejado crecer para defender sus intereses de clase.
Tal vez este peldaño suponga un descenso cualitativo que ha hecho saltar las alarmas en el PNV, EA y Aralar. Los líderes de estos partidos políticos seguramente han empezado a entrever la gran verdad que esconden los archicitados versos de Brecht: los siguientes en la lista son ellos.
Las últimas detenciones no son fruto del azar; responden, por el contrario, a un plan estratégico bien calculado dirigido a minar los puntales más sólidos de oposición al bipartidismo político y sindical que el PPSOE intenta imponer en todo el Estado español.
1. Se detiene a Otegi, líder carismático de la izquierda abertzale y cara visible y reconocible de un posible proceso de materialización de un proyecto de izquierda radical al margen de la lucha armada, ¡precisamente bajo la acusación de impulsar ese proceso pacifista!
2. Se detiene a Díez Usabiaga, ex-dirigente del sindicato LAB. Finalmente, tras múltiples intentos "por las buenas" -léase amarillización- el Gobierno español ha comprendido que se le escapaba de las manos la mayoría de trabajadores vascos porque no podían comprar las voluntades de las dos grandes centrales sindicales locales. Aunque "negocien" con los sindicatos CC.OO y UGT -cuya deriva bochornosa hacia el servilismo empresarial, ya antigua, merecería comentario aparte- comprenden que ello no hace sino afectar aun más a su ya devaluada imagen entre los trabajadores vascos. Urge, pues, la vía judicial ante la imposibilidad de hacer "entrar en razón" a las organizaciones sindicales.
3- Detienen a Sonia Jacinto, tesorera de Iniciativa Internacionalista, con lo cual dejan clara la imposibilidad de que esta coalición pueda volver a presentarse a próximos procesos electorales.
Hace tiempo que podía atisbarse que, tras la ilegalización de ANV, un partido político con más de medio siglo de historia, llegaría la de Aralar, EA, etc. Nada es suficientemente sagrado para quienes se han aplicado con determinación a acabar en unos pocos años y por las malas con cualquier oposición política con opciones reales de acceso al poder. En suma, la de cualquier asociación relevante de personas que no se pliegue estrictamente al pensamiento único dominante. Y, en este contexto es en el que aparece la china en el zapato que suponen los sindicatos abertzales.
Toca inventar ahora alguna argucia pseudolegal para, a través de un sistema judicial cada vez más visiblemente politizado, hacerlos desaparecer. Es solo cuestión de tiempo.
Esto es aterrador. Cualquier persona aun no del todo narcotizada por la propaganda y capaz de saber qué implica que exista un organismo como la Audiencia Nacional, que actúa a iniciativa política y con fines políticos, que está imponiendo desproporcionadas sentencias a prisión a través de acusaciones insostenibles en las que se vulneran los principios más básicos del sentido común, la judicatura y la humanidad, cualquier persona aun capaz de pensar debería sentir miedo. ¿Es eso, el miedo, lo que se persigue también?
Pero tal vez llegar a esta ignominia haya sido necesario para que Euskadi despierte de su sueño y su autocomplacencia, la de suponerse todavía a la cabeza de la sanidad y la educación públicas, la de suponer que tras el expolio industrial de los últimos 30 años, Euskadi pinta aun algo en la economia mundial. Ahora que este espejismo se desvanece, ahora que ya ni siquiera se sostiene el orgullo tonto del nacionalismo folclórico-cultural de cartón piedra, derribado de una patada por los nuevos amos de Ajuria Enea, quizá sea el momento de reclamar, porque de pronto las echamos dolorosamente de menos, libertad y democracia, esas dos palabras que de tanto ser prostituídas, ensuciadas y desvirtuadas han dejado de tener un contenido real para convertirse lo mismo en un slogan para vender coches que para justificar el terrorismo judicial.
martes, 20 de octubre de 2009
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3 comentarios:
Garzón me decepciona mucho con estos temas. Lo que gana con casos como el de Pinochet lo pierde conviertiéndose en un funcionario al servicio del poder establecido. No olvidemos que la "justicia" es uno de los mejores medios de los que dispone el poder para ejercer la represión. Así en la época de Sharon se cargaron a 1500 personas (también mujeres y niños) porque eran terroristas. Todo lo que no vaya en favor de los intereses del poder dominante se demoniza y elimina. Garzón demuestra estar sólo sensibilizado hacia las injusticias por el contexto en el que trabaja, no porque tenga una verdadera ansia de justicia.
Como dices estas detenciones no son fruto de la casualidad ni de coincidencias. Simplemente es una guerra en la que el fuerte usa la justicia para aparentar buenas formas, para aparentar ser el "bueno". Si no recuerdo mal en la época de la tregua a nadie se le ocurrió procesar a Otegi. ¡Vaya casualidad que ahora vengan todas!.
Como guerra que es entre dos bandos supongo que se busca conseguir material con el que volver a negociar. Esto es, si ahora detenemos a 50 podremos negociar por valor de 50, que siempre será mejor que negociar con un único preso.
Sólo conozco este tema desde fuera pero tengo una suposición, aunque es bastante probable que me equivoque. Pensando en la novedad de que haya un gobierno no nacionalista en el País Vasco, y teniendo en cuenta que la gente no se suele cambiar de bando (del nacionalista al no nacionalista) como sucede a nivel estatal en el que mucha gente vota PP o PSOE aleatoriamente, sólo se me ocurre que la inmigración de grupos de población de otras zonas de la península haya invertido la pirámide. Casos de este estilo han pasado a lo largo de toda la historia. Sin ir más lejos Stalin envió adrede a muchos rusos a Georgia que han sido los que luego se han terminado amotinado para buscar la anexión de nuevo. En fin, sólo es una sospecha. Quizás esté completamente equivocado, pero ¿crees que podría ser?
Saludos
Me parece admirable que, como tú dices, viendo las cosas desde fuera muestres esta falta de prejuicios. No te imaginas cómo me alegra que personas que no viven aquí tengan la capacidad de ver más allá de la información -casi siempre tendenciosa, cuando no directamente falsa- que ofrecen los medios de comunicación.
Con respecto a lo que comentas del cambio electoral, no creo que la inmigración tenga mucho que ver, ya que el desplazamiento masivo de ciudadanos procedentes, sobre todo de Extremadura, se produjo en los sesenta. Por cierto, esta inmigración se mezcló inmediatamente con la población autóctona y asumió los postulados nacionalistas sin ningún conflicto, en contra de toda la literatura que se ha escrito en este sentido. Yo soy una prueba de esta mezcla: madre aragonesa y padre vasco.
Las cifras electorales no han cambiado: la situación actual se ha producido al ilegalizar a la izquierda abertzale. De otro modo, PSOE y PP jamás podrían haber obtenido la mayoría absoluta. Ten en cuenta que entre 100 y 200.000 personas han sido privadas del derecho a voto en un país relativamente pequeño como Euskadi. Por eso creo que todo está bien calculado.
Gracias por tu comentario y un saludo.
Esperemos que ese atisbo de resistencia no se diluya con el paso del tiempo... Para Blues, aunque ya Dizdira te lo ha comentado, el cambio de "tendencia" hacia el españolismo no ha existido, la mayoria social vasca es nacionalista, pero mas de 200.000 personas han sido privadas del derecho de votar, lo que ha permitido que el reparto proporcional de escaños haya favorecido a los partidos de Madrid.
En cuanto a lo que dices de Georgia, que Stalin trasladara alli a muchos rusos no fue algo caprichoso, como tu dices. El traslado fue tras la matanza producida por los nazis en la SGM (los sovieticos soportaron la mayor cantidad de victimas en la liberacion de Europa, y no cambiaron sustancialmente la poblacion original), con el fin de reconstruir y repoblar los vacios de poblacion creados. Recuerda que el mismo Stalin era georgiano, no ruso, y que escribio y legislo mas que ningun politico occidental sobre el derecho de autodeterminacion de los pueblos (que por cierto luego permitio que las republicas sovieticas, tras la perestroika) decidieran su independencia de la URSS.
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