Este era el grito de indignación de miles de manifestantes turcos ante la embajada de los sionazis en Ankara. Es el grito de indignación que en teoría debería compartir hoy cualquier ser humano.
Sin embargo, las ratas de corazón sucio y cerebro lavado que vemos en el vídeo, celebraron la masacre de inocentes ante la embajada de Turquia en Tel Aviv, como si de un partido de fútbol de tratara.
Pero los creyentes tenemos la ventaja de tener esperanza: la esperanza de que estos crímenes no quedarán impunes. Yo no necesito demostraciones de la existencia del infierno: ante cosas como esta es evidente que el infierno es necesario.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
4 comentarios:
En eso tienes razon. Los que no creemos en dios tampoco podemos dudar de que el infierno existe, y de que el mal también.
No sé si me salgo del tema pero creo que si hay infierno nosotros vivimos en él porque está en esta vida. En el caso de un Dios "amoroso" no veo lógico un lugar (infierno o lo que sea) en el que descargue su ira. Lo que hay después de esta vida sería simplemente la nada, la muerte como desaparición. El infierno tendría lógica para un Dios vengativo. En ese caso sería cruel y, ya puestos a ser cruel, mejor plantarnos en un "mundo finito" en el que suframos un martirio constante.
Saludos
Yo no espero que el fiscal general del estado de aquí inicie los trámites para procesar a todos los implicados. Es competente desde el momento en que ha habido tres españoles detenidos ilegalmente por individuos armados.
José Luis:
El mal es evidente, y el infierno para los malvados lo considero necesario porque no es para mí un artículo de fe, sino de esperanza.
Blues:
Es un debate interesante éste, pero yo en principio no veo incompatibilidad -sino casi todo lo contrario- entre un Dios amoroso y un castigo del mal.
pcbcarp:
Es que estos piratas no son de Somalia, sino del pueblo elegido. ¿Y qué decir de los 20 asesinados y de sus respectivos países? No creo ni que Erdogan se atreva a tomar ninguna medida real.
Publicar un comentario